Relación entre la Calidad del agua y el deterioro de envases metálicos en la industria conservera

Relación entre la Calidad del agua y el deterioro de envases metálicos en la industria conservera

En la industria conservera el agua es un elemento clave, esta se usa para mantener la higiene de los alimentos, maquinarias y para el enjuague de las latas, además es usada para crear el líquido que se incluye en las latas de conserva, para generar vapor y para muchas otras actividades.

Debido a la importancia del agua en la producción de conservas en lata, la calidad de esta es fundamental, en especial cuando se trata de velar por la integridad de las latas usadas en el proceso.

Calidad del agua y deterioro de las latas

Las latas usadas en la industria conservera deben pasar por procesos de revisión exhaustivos, así se previenen problemas de contaminación, pérdida de hermeticidad, de esta forma se garantiza que se usen solo las latas que cumplan con las características de higiene y calidad en general.

  • Estas latas tiene una capa de barniz, pero, en ocasiones puede ocurrir un desbarnizado, cuando esto pasa y además se usa agua cuya calidad no es la mejor, esa que contiene cloro residual en exceso y ciertos iones metálicos, entonces la misma sufrirá procesos de corrosión que pondrán en riesgo la calidad del alimento enlatado.
  • Las latas son tratadas térmicamente cuando se introduce el alimento en estas y luego se utiliza agua para enfriarlas, en ambos casos el uso de agua de calidad es fundamental, es necesario que solo se use agua tratada, de lo contrario la conserva puede contaminarse con microorganismo a través de la infiltración.

Cuando se usa agua blanda que no tenga más de 50mg/l, se puede prevenir la aparición de manchas blancas calcáreas que pueden encontrarse en las tapas de algunos envases metálicos.

  • El agua usada debe cumplir con cierta cantidad de cloro residual, la adecuada es de 0,5 ppm, solo así se evitará la corrosión externa del envase.
  • Algunos procesos de enlatados utilizan procesos de pasteurización, en dicho proceso se utiliza agua y en estos casos será necesario garantizar el uso de aguas blandas, de esta forma se puede tener la certeza de que no ocurrirá corrosión galvánica de la lata.

En cada proceso de lavado o preparación, el agua usada en la industria conservera debe ser la idónea, por ejemplo, en el caso de las latas de conservas en aceite, el agua es calve para eliminar el exceso de aceite que quede fuera de la lata.

Cuando no se quita adecuadamente dicho exceso de aceite, la lata se manchará y también el etiquetado, para un lavado más efectivo es necesario hacer uso de agua, pero en combinación con un jabón neutro.

En conclusión, el agua es el elemento más importante, por eso garantizar su calidad a través del adecuado proceso de control de calidad, permitirá la producción de conservas en lata, aptas para el consumo, duraderas, de la mayor calidad.